Abiertos en canal
De Takuya Yokoyama
Con Jonás Alonso, David Castillo y Oriol Pàmies
Grande el debut en el teatro comercial de Samuel Viyuela González y Alba Enríquez, con un texto que a pesar de su calidad incuestionable exige una dirección muy afinada. Grandes también los actores, un poco más David Castillo y Jonás Alonso, sólo porque sus papeles son algo más intensos.
Entramos en un mundo que no queremos ver pero que necesitamos y usamos indirectamente, un matadero y más concretamente en la sala de descanso de la seccion de despiece de cerdos. "Abierto en canal" se refiere a una técnica concreta en la que se aprovechan todas las partes del animal. Mientras dos compañeros, amigos desde hace tiempo, están conversando, aparece un joven que, intuyen, quiere trabajar ahí, pero para su sorpresa no tiene experiencia previa y preferiría trabajar en direccion. Cuando descubren que es el hijo del principal proveedor del desolladero, ya habrán revelado demasiados secretos y se habrá perdido un encéfalo de vaca, necesario para descartar la enfermedad de las vacas locas.
En clave de comedia y con unas conversaciones muy locuaces pero que parece que no se habla de nada importante, se van rebañando las capas como en una cebolla y va saliendo lo más básico del ser humano. La necesidad de trabajar aunque no nos guste, el semifeudalismo existente aún en algunas fábricas, la empatía con los animales aunque nos los comamos, la amistad entre dos hombres que se puede romper con la llegada de un tercero... todo ello fluye con una naturalidad y un realismo (obviamos los poéticos principio y final) que nos atrapa.
Felicidades al equipo y esperamos muchas funciones y mucho éxito.
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